Si tienes una habitación pequeña y quieres que parezca más grande, una de las claves está en la elección del color. Existen colores que agrandan visualmente los espacios, ayudando a crear sensación de amplitud, luminosidad y ligereza sin necesidad de hacer obras.
¿Qué colores que agrandan visualmente puedes usar en casa?
Los tonos claros, neutros y fríos son tus mejores aliados. Aquí te compartimos algunas ideas que funcionan muy bien:
Blanco puro o roto
El clásico de los clásicos. Refleja la luz natural y multiplica visualmente el espacio. Perfecto para paredes, techos y muebles.
Gris claro
Moderno, elegante y muy versátil. Aporta profundidad sin restar luminosidad y combina genial con detalles en negro o madera natural.
Azul suave o azul cielo
Los tonos fríos como el azul pastel o azul niebla también son colores que agrandan visualmente. Dan una sensación de frescura y apertura, ideal para baños o dormitorios.
Verde salvia
Un tono que transmite calma y conexión con la naturaleza. Además, si se combina con blanco y madera clara, consigue un efecto muy armónico y aireado.
Beige o arena clara
Son cálidos, acogedores y no saturan. Funcionan muy bien en salones pequeños, aportando amplitud sin perder calidez.
Consejos extra para potenciar el efecto
- Pinta el techo del mismo color (o un tono más claro) que las paredes para que parezca más alto.
- Usa acabados satinados o con algo de brillo: ayudan a reflejar la luz.
- Evita los contrastes muy fuertes o los colores oscuros en exceso.
- Si te animas, pinta una sola pared en un tono más intenso para crear profundidad (por ejemplo, un azul humo o un gris piedra).